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Esperanza puerta a puerta
Viernes, 9 julio 2021
Poco después de dar a luz a mellizos en el Hospital de Kalyandurg, uno de los bebés de Sunita tenía dificultades para respirar y presentaba niveles anormales de azúcar.

Chandra es terapeuta del programa de Atención Temprana de la Fundación Vicente Ferrer. Al conocer el caso, entró en contacto con Sunita.
“Trabajamos con mujeres prenatales y posnatales y con menores de cinco años que muestren retrasos en el desarrollo, signos de parálisis cerebral o discapacidad intelectual”, explica.

“Estaba muy preocupada por la salud de mi hijo, pero ahora me siento aliviada. Estoy segura de que con la terapia y los cuidados adecuados pronto se pondrá bien”, cuenta Sunita.
En esta primera consulta, Chandra asesoró a Sunita sobre posturas y cuidados básicos.

Después de doce años en funcionamiento, la pandemia interrumpió bruscamente el programa de Atención Temprana durante seis meses. Desde septiembre de 2020, Chandra se encarga de atender en el centro de lunes a sábado y otros terapeutas organizan sesiones de terapia a domicilio.

El bebé de Triveni, nacido prematuramente a las 32 semanas, presentaba retrasos en el desarrollo. Desde noviembre de 2020, recibe terapia para fortalecer sus músculos y mejorar su movimiento.

Chandra ha atendido a 296 bebés desde que se reanudó el servicio. “Las familias suelen venir preocupadas y nerviosas, pero también con esperanza. Gracias a nuestra terapia y a los ejercicios realizados con regularidad, se alegran al ver los pequeños progresos que hacen sus bebés. Esto me da una alegría inmensa”, dice.

Gananya, una bebé de 14 meses, sufría retrasos en el desarrollo tras ser operada con solo dos meses de vida. Tenía una acumulación excesiva del líquido que rodea el cerebro y la médula espinal.
Desde octubre de 2020, Chandra la ha estado tratando para fortalecer sus músculos y proporcionarle apoyo y estimulación lúdica.

“Después de tres meses de terapia, nos alegramos mucho al ver que Gananya utiliza apoyo para ponerse de pie por sí misma. Nos hace muy felices verla crecer”, expresa la familia con una sonrisa.
Actualmente, 450 niñas y niños reciben terapia y rehabilitación a través de este programa.
